Nº 1584– 9 de Noviembre de 2014
La siembra de la semilla no es suficiente para que se obtenga fruto. La siembra de la semilla ha de ir acompañada de fe y confianza. Si se siembra la simiente con fe y se cuida con perseverancia, sólo será cuestión de esperar a recoger sus frutos. Pero la imaginación Leer más